Preguntas Frecuentes

Te respondo las cuestiones que más me consultan

Gracias a la terapia breve, puedo ayudarte a lograr un cambio real en el comportamiento de tu adolescente en solo 6 sesiones

¿Por qué elegir la terapia indirecta?

Los padres suelen decidir pedir ayuda profesional cuando están ya desmoralizados y exasperados. Por eso es habitual encontramos con un clima familiar deteriorado y totalmente contaminado por el problema o conflicto.

Para trabajar este tipo de situaciones es preciso trabajar con lo que ocurre actualmente en casa. Es poco efectivo enfocarse en conductas pasadas que, aunque hayan generado el problema, ya no podemos cambiar.

Podemos aceptar que el origen de los problemas esté en el temperamento del hijo o hija, sus actitudes o incluso «las malas compañías», pero eso no hace que ellos vean necesario hacer una terapia. A menudo no son conscientes del problema o simplemente no tienen interés en cambiar.

La terapia indirecta no culpabiliza a los progenitores por los problemas de sus hijos, pero sí les convierte en corresponsables de su solución.

¿Por qué van los padres a terapia y no el adolescente?

El motivo por el que hago una terapia indirecta a través de los padres y madres sin ver a los niños es porque mi experiencia me indica que es más eficaz, ya que toda la información que necesito ya la tenéis los padres. Nadie mejor que vosotros conoce al niño, así a él le ahorramos venir al psicólogo, con todo lo que esto conlleva: etiqueta, patologización, rebeldía por no querer acudir…

Además los niños ven que cuando tienen un problema sus padres le ayudan, esto refuerza el vínculo y los niños tienen más confianza en sus padres. No te quito poder como padre o madre.

En mi modelo de terapia, los padres somos los principales agentes de cambio.

¿Cómo funciona este método?

La Terapia Breve Estratégica trabaja mediante técnicas muy efectivas que se empiezan a realizar desde el primer día. Se trata de «hacer un traje a medida» para cada persona, ya que no hay dos personas con la misma historia, experiencia, personalidad, etc.

El objetivo es hacer cosas diferentes a las que hayáis podido hacer hasta ahora para intentar resolver el problema.

Si seguís haciendo lo mismo, el problema difícilmente se podrá solucionar. Se cronificará y empeorará.

¿Por qué 6 sesiones?

De cada sesión saldrás con unas pautas terapéuticas concretas que tendrás que seguir al pie de la letra, una especie de “deberes para casa” que se convertirán en las herramientas para solucionar el problema. Este método es muy eficaz y no necesita de más sesiones.

No por ver tener más sesiones, la resolución será mejor ni más rápida.

¿Qué pasa si no funciona?

Si los padres y madres realizan los deberes como se indican, es muy difícil que no se produzcan cambios significativos. Puede ocurrir que durante el proceso, el menor pida ayuda individual, en ese caso se inicia un tratamiento paralelo con el o ella y podría necesitarse alguna sesión extra.

En el 85 por ciento de los casos no se necesita al menor en consulta y resolvemos los problemas en sólo 6 sesiones.

Con la terapia indirecta, trabajamos nosotros para ayudar al adolescente sin que él sea consciente y así lograr un cambio efectivo

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